El cable eléctrico se aplica para transmitir y distribuir energía en sistemas de transmisión y distribución de energía de 35 kV o menos. Es ampliamente adoptado en los campos que incluyen energía, construcción, minas, metalurgia, industria petroquímica y comunicaciones en reemplazo completo del cable de alimentación con aislamiento de papel sumergido en aceite y en reemplazo parcial del cable de alimentación con aislamiento de PVC.